Vistas de página en total

lunes, 28 de noviembre de 2011

Sé el primero en reír

Dicen que el que ríe el último, ríe mejor. ¡Valiente tontería! Yo creo que lo importante es reír, da igual el orden en que lo hagas. Todos debemos tener la oportunidad de reírnos, y hacer de esto una costumbre mientras sigamos vivos. Aunque la vida no muestre su mejor cara, el tiempo transcurre sin demora. Los aconteceres suceden sin previo aviso, y no podemos pararlo. Puedes ser el mejor trabajador del mundo y no estarás exento de un despido, puedes cuidar tu cuerpo más que nadie y no evitarás un problema de salud. La muerte llegará para todos, nadie sabe el momento.

A veces pienso dónde se hallará esa niña a la que los días se les hacían cortísimos jugando en la calle al caravinagre, o al elástico o pintando truques en el asfalto. Esa que no paraba de reír nunca y a la que su madre le reñía, precisamente, por reír demasiado. Es como si a lo largo de los años nos hubieran estado absorbiendo el coco para que nuestro cerebro esté en constante preocupación, de tal manera que nos preocupamos, no sólo por lo que ocurre, sino por lo que pueda llegar a ocurrir, sin haber ocurrido todavía. Solemos ponernos en el peor de los casos con los posibles problemas futuros, no sólo propios, sino también con los ajenos. Y convertir en problemas hechos que son dignos de alegría. ¿Qué nos ha pasado?

Quizás una sociedad preocupada, apocada y temerosa sea más controlable que una fuerte, valiente y alegre. No lo sé. Lo cierto es que hemos dejado de reír, con temor de no ser el último que ríe. Y esperando ese turno, se nos va la vida sin sonrisas. Perdamos el miedo a ser el primero en reír, si esto provoca la risa de otros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario